martes, 17 de noviembre de 2009

Cambios despues del Concilio Vaticano II - Carla Cifuentes, Tamara Garcia


En el primer dibujo se representa como se realizaba la eucaristia antes del Concilio Vaticano II donde el sacerdote hacia la misa dado vuelta y dos personas sujetaban su vestuario.


En el segundo dibujo se representa como se realiza actualmente la eucaristia, donde el sacerdote esta mirando a las personas que asisten a misa y nadie sujeta su vestimenta.

2 comentarios:

  1. Estimado profesor, por casualidad he llegado a su blog, y me han llamado especialmente la atención los dibujos que sus alumnas realizaran comparando la misa antes y después del Concilio Vaticano II (CVII), el año 2009, por lo que puedo inferir.

    Y posteo en este dibujo porque he encontrado que es el mejor, pero sospecho que no les ha enseñado sobre el CVII como debiese hacerlo, sino que más bien se limitó a simplemente darles una idea demasiado superficial, y en cuanto a la reforma litúrgica de 1970, temo que sólo las ha llenado de ideas impropias, que les crean la imagen de una falsa Iglesia preconciliar, como si hubiese estado alejada de su grey.

    Quisiera destacar el dibujo de Constanza Fica y Camila Torres, del 1.º de diciembre, que me hace sonreír, se ve que no comprendieron bien el concepto de que el sacerdote estaba "al revés". Y el de autoras anónimas con fecha 12 de noviembre y título "liturgia", que tristemente me preocupa.

    Primero, me parece que Vd. no les dió las pertinentes explicaciones de por qué el sacerdote le daba la espalda a la asamblea asistente. Ha de saber, que antes en cada altar al medio de éste se encontraba un tabernáculo, en el que se depositaba la Sagrada Comunión antes de celebrar la Misa en él, y lo común era que en el altar mayor (el principal) quedase siempre la Comunión contenida en su tabernáculo, de manera que al celebrar en otros altares, se llevara un copón al tabernáculo correspondiente. Entonces, el sacerdote le daba la espalda a la gente por no dársela a nuestro Señor presente en el sagrario, de manera que todos, sacerdote y fieles, estaban de cara a Dios. Ahora bien, el sacerdote se giraba hacia la asamblea cuando se dirigía directamente a ella, ej. "Oremus", "Orate fratres, ut meum ac vestrum sacrificium... (Orad hermanos, para que este sacrificio mío y vuestro...)", "Dóminus vobiscum (El señor esté con ustedes)", al dar la bendición, al leer las lecturas en castellano, etc. Lo invito a revisar los ritos ambrosiano, copto, bizantino, y otros, donde la Misa todavía se celebra "de espaldas al pueblo".

    Segundo, el que la Misa se rezare o cantare en latín, nunca fue impedimento para que los fieles comprendieran lo que ocurría en el altar, y a esto me refiero por el dibujo cuyo link permanente es

    http://4.bp.blogspot.com/_okKtIQq2T3s/SvwCQWgQgsI/AAAAAAAAAGA/I1qMj_Ebwu8/s1600/LITURGIA%2B1.jpg

    Debió prontamente explicar a sus alumnas, que la mayoría de las personas, solía llevar su "misalito" un pequeño libro, del que se podía seguir la Misa completa, que aparecía con una columna en latín y otra en castellano. Además de que sabían responder de memoria la Misa y que se les daba una conveniente catequesis para que entendiesen lo que decían. Sobretodo los acólitos o monaguillos, que siempre han comprendido mejor que nadie cada parte de la Misa, diciendo el cura "Dominus Vobiscum" o "El señor esté con ustedes". La liturgia era antes en latín por motivos de universalidad, de manera que "en todo el mundo la Misa era la misma", entonces uno podía entender la Misa estando en Chile, en Francia, en Italia, en Inglaterra, en China, en Polonia o en cualquier parte del mundo, del mismo modo, un chileno, un francés, un italiano, un inglés, un chino o un polaco podía seguir la Misa estuviese en Chile, Francia, Italia, Inglaterra, China o Polonia, y no sólo en su país como ocurre actualmente, y personalmente a mí me pasó en Surinam, donde entendía muy poco la Misa porque estaba completamente en holandés, me ayudó el conocer los ritos del sacerdote en el altar.

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  2. También, creo que olvidó Vd. explicar, que hoy en día la Iglesia dejó de combatir la forma antigua del rito (salvo por algunos sacerdotes extremistas), y que más bien intenta promover ambas formas del mismo rito Romano, especialmente después del Motu proprio "Summorum Pontificum" de S.S. Benedicto XVI, de julio del 2007. Y desde entonces, que cada vez se van multiplicando los lugares donde se celebra de ambos modos, y aún más, lugares donde sólo se celebra con la forma extraordinaria. Así la ha llamado el santo Padre, la forma ordinaria del rito romano es la liturgia reformada de 1970, la forma extraordinaria del rito romano es la liturgia preconciliar. La idea actual de promover ambas formas del rito, se debe a que la Iglesia se ha dado cuenta que no puede de pronto decir que la liturgia antigua estaba mal y la nueva no, que lo que antes era santo y sagrado ya no lo es, esto implicaría una discontinuidad en la tradición de la Iglesia, y fue la causa de tristes heridas ocurridas luego del Concilio, por ejemplo, la renuncia de dos tercios de los sacerdotes y religiosos del mundo, la disminución exponencial de los seminaristas y laicos consagrados, la terrible reducción de los fieles asistentes a los oficios, variados cismas, y un largo y penoso etcétera.

    Sería buena idea, quizá, mostrarles a sus alumnas videos con los que estudiaran las partes de la Misa, bajo las dos formas, y que aprendieran a conocer y sobretodo valorar la vasta riqueza que nos ofrecen las liturgias del Rito Romano.

    Espero que mis palabras no caigan en saco roto, y le agradecería una respuesta, y tal vez un medio de contacto, para dicutir más profundamente el tema y los desafíos que nuestro Señor nos ofrece hoy en día a quienes enseñamos la religión.

    Que Dios lo bendiga. Cordialmente,

    Sebastián Tello Crino.

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